jueves, 25 de julio de 2019

Típico country/crossover


En algún lugar y momento he dicho que lo fundamental de una canción, para mi, es la música. Pero me puedo retractar en cualquier momento y defender lo contrario al escuchar y entender la letra de estas canciones. He aquí unos ejemplos que siempre me han gustado, donde se ve como una pieza típicamente country pasa a una canción pop con mucha más difusión. Curiosamente han coincidido canciones con títulos bastante largos.

Have You Ever Been Lonely? (Have You Ever Been Blue?) es una canción popular publicada en 1932. Ha sido grabada por muchos cantantes, convirtiéndose en un estándar.
La versión que más me gusta nunca se ha grabado en vivo. Have you ever been lonely? es un "dúo" creado electrónicamente con cantantes de música country, Jim Reeves y Patsy Cline, quienes murieron en accidentes aéreos separados (Cline en 1963, Reeves en 1964) y nunca habían grabado juntos durante sus vidas. En 1961, ambos cantantes grabaron sus propias versiones en solitario de la canción y la lanzaron en varios álbumes.
En 1981, Owen Bradley, que era el productor original de Cline, recuperó sus interpretaciones vocales en solitario de sus cintas estéreo originales, las sincronizó y grabó una nueva pista de acompañamiento. La canción fue lanzada en el otoño de 1981, y en enero de 1982 se convirtió en un número 1.



To make a long story short (she’s is gone) está compuesta por Willie Nelson en 1967. Aquí la interpreta junto a Kris Kristofferson, otro de los "outlaws". En el título ya está contenida toda la historia.


For the good times es una canción compuesta por Kris Kristofferson, cantada por otros antes de aparecer en el LP debut de Kristofferson en 1970. Fue grabada por multitud de cantantes en los siguientes años; desde Elvis a Sinatra pasando por Michael Jackson que se la cantó a su madre en su cumpleaños en 1984.
En 1971 ganó el premio a la canción del año de Academy of Country Music . En 2014, la revista Rolling Stone la colocó en el nº 18 de sus "40 más tristes canciones de todos los tiempos".
Me ha gustado siempre desde que compré el LP de Kristofferson y, además, me han gustado muchas de las versiones que se han hecho.



Mientras que Kristofferson muestra bastante tristeza al cantarla,  igual que Dean Martin en otra entrada en éste blog, en ésta versión no parece darle demasiada importancia a estos recuerdos. Pero hace una versión genial.



De 1984 es la grabación a dúo de Seven spanish angels. Drama musical de esos que uno empieza a escuchar pañuelo en mano y lo termina abatido en el sillón lamentando las tragedias ajenas. La canción narra la historia de dos amantes mexicanos que son sorprendidos cuando intentan cruzar la frontera ilegalmente y, por supuesto, terminan muertos o más bien asesinados. Existen varias grabaciones del tema, aunque ninguna alcanza, ni de lejos, la tensa emotividad que surge de la química entre Ray Charles y Willie Nelson.
Una historia que puede estar sucediendo ahora mismo en la frontera que Trump intenta sellar.



Dwight Yoakam en su LP de 1988 Buenas noches from a lonely room  cuenta historias, fundamentalmente, de corazones rotos, hasta llegar a la del título del álbum en donde añade un subtítulo Buenas noches from a lonely room (She wore red dresses) que termina con un asesinato, de los que llevamos más de 1000 en los últimos años en España –violencia de género.
Le acompaña el famoso acordeonista Flaco Jiménez que hace un muy buen dúo con el bajo.



viernes, 19 de julio de 2019

Canta Napoli


Cantantes y canciones que solo los de cierta edad recuerdan y que cambiaron el rumbo de la música europea al prescindir de la orquesta y con un pequeño grupo, ‘conjunto’, cuatro o cinco amigos eran autosuficientes para cantar y acompañarse. Canciones que oía cuando era niño pero, como las canciones buenas de antes, quedaban grabadas en nuestro recuerdo durante mucho tiempo, prácticamente toda la vida, y aún 20 y 30 más tarde, las volvíamos a poner en las fiestas que celebrábamos ya casados y con niños y eran reconocidas, canturreadas y bailadas por todos.
Eran las canciones italianas que nos llegaban a mediados de los 50. Entre las que destacaron las de Renato Carosone que lo contaba así: «Al acabar la Guerra Mundial me di cuenta de que la canción napolitana se quedaba fuera de los clubes nocturnos porque no era bailable. Lo que yo hice fue añadirle el aire «swing» o “boogie” de los clásicos americanos».
Su canción «Torero» escrita para una gira en España fue primera en el Hit Parade americano durante catorce semanas y fue traducida a doce idiomas.
En 1955 sale el disco Maruzzella de Renato CarosoneEn una canción en dialecto napolitano, nada fácil de entender. Maruzzela tambien fué una de las primeras películas musicales que se han hecho, fue en 1956 con Marisa Alasio y el mismo Carosone. Se han grabado cientos de versiones y, curiosamente, fue la última canción que grabó Peret.



En 1956 gana el Festival de Nápoles Guaglione  –del dialecto napolitano-  que en italiano significa Bambino y en español Chiquillo. Es una de las grandes joyas de la canción italo-napolitana. La versión de Aurelio Fierro, que se mantuvo en lo más alto de las listas durante seis semanas y fue la segunda más vendida del año, se ha impuesto como la auténtica.


Rápidamente en Francia, Dalida (egipcia) hizo su versión en francés Bambino, y Gloria Lasso (española) en francés y español, Chiquillo.  Gloria Lasso fue la figura más internacional que tuvo la canción española durante los años cincuenta. Su gran éxito comenzó en Paris y luego se extendió a todo el mundo. Curiosamente grabó en español la canción original de My way bastante antes que Paul Anka y Frank Sinatra.



En 1957 Piccolissima serenata fue un éxito por Renato Carosone. En 1958 la grabó Teddy Reno e hicieron una peli , "Totò, Vittorio e la dottoressa" con Teddy Reno cantando y Totò, Vittorio de Sica y Abbe Lane en los principales personajes. No es la versión más conocida pero si había un video adecuado. Este cantante y productor se casó años después con Rita Pavone.


En 1959 Rocco Granata –con un poco de ayuda de sus amigos, organizó un estudio y grabó Manuela, un antiguo estándar italiano al que Rocco le dio un nuevo aire. Pero nunca pensó en el hecho de que un disco debía tener una cara-B. Así que, justo antes de ir al estudio y sin pensarlo, se decidió por la canción Marina, una improvisación que había hecho durante el intermedio, mientras que el resto de la banda fue al baño y el joven Rocco tenía el escenario para él solo. La letra de la canción aún no estaba terminada y en el estudio, para gran molestia del ingeniero de sonido, Rocco tuvo que escribir algunas líneas más. 
En enero del 60 Marina sustituyó a "Oh! Carol" de Neil Sedaka durante una semana en el nº1 de la Lista Europea de éxitos. En Holanda, el número de niñas llamadas Marina subió de 156 en 1958 (antes del éxito de la canción) a 190 en 1959 y 250 en 1960: un incremento del 22% en 1959 y del 32% al año siguiente.



A quienes no les suenen estas canciones es por que no habían nacido antes de los 60 y además tampoco se han interesado por lo que se escuchaba antes de ellos. A mi me pillaron en Valencia y al poco de llegar a Madrid.


sábado, 6 de julio de 2019

Pavlov, los perros y yo.


Durante los años 80, mientras estudiaba en casa, escuchaba todos los días de 6 a 7 de la tarde en Radio 4 a Joan Tortosa locutor especialista en rock de los 50 y de country en el programa "Torçant l'agulla".
Escuchaba el programa, estudiaba (lo de menos) e iba grabando en casettes lo que me gustaba. Tenía entonces un pastor alemán, Nimbo, que se tumbaba a mis pies durante el programa que se despedía siempre con: Goodnight my love grabada en primera instancia por Jesse Belvin en 1956. Entonces le ponía la correa a Nimbo y salíamos a dar su paseo vespertino
El programa terminó y cuando tiempo después ponía las casettes y sonaba esta canción, fuera la hora que fuese, Nimbo se ponía delante de mí y me indicaba que había que salir. Y esta canción siempre me lo recuerda. Típico condicionamiento de Pavlov para Nimbo, entonces, y para mi ahora.
Y de recordar a Nimbo paso a recordar todos los otros perros que me han acompañado a lo largo de muchos años. Mao, no podía llamarse de otra forma habiéndome llegado en 1967. En aquellos años no había cámara de fotos en casa así que no puedo mostralo; era de raza indeterminada entre pastor alemán y podenco andaluz. Donna, una pastor alemán, por la canción “Donna Donna” de Joan Baez en 1970. Nimbo, otro pastor alemán, en los 80, cuando ya trabajaba en Meteorología, de ahí el nombre. Gus, un spaniel-tibetano, muy pequeño que recordaba al ratoncito Gus de La Cenicienta y a un gusano, por lo pequeño, en los 90. Y finalmente, Priya, una preciosa Cavalier, cuyo nombre significa “Querida” en sánscrito, desde 2016.