jueves, 30 de marzo de 2023

Pelis y canciones

 

Mon oncle es una película francesa de 1958 dirigida por Jacques Tati que ganó ese año el Óscar a la mejor película extranjera. Aunque sea sonora, tiene claras insinuaciones de cine mudo, ya que los escasos diálogos no son esenciales, siendo de mayor significación los gestos y las situaciones. En estas, se advierte la comicidad, no a base de movimientos de los personajes, sino del automatismo y la falta de conciencia que se advierte, además del manejo de los espacios y de los diseños, ricos en exageraciones y mensajes subliminales satíricos. 
Hay muchos escritos, comentarios, críticas buenas (la gran mayoría) y malas. Pero, en todo caso, es una peli a la que me llevaron mis padres con mis hermanas en 1958, en nuestro primer año en Madrid, creo que en un cine de Bravo Murillo, y nos gustó a todos, pasamos un buen rato, nos reímos y nos quedamos con la cancioncilla.



El hombre que sabía demasiado es una película de 1956 dirigida por Alfred Hitchcock y protagonizada por James Stewart y Doris Day, remake de otra de 1934 rodada en Inglaterra por el mismo Hitchcock.

En Madrid tardó en estrenarse hasta finales de julio de 1960 en el Palacio de la Prensa, y me acuerdo de esto porque yo acababa de llegar a Madrid de una marcha por alta montaña desde Canfranc a Ordesa (Canfranc, Candanchú, Sallent, Panticosa, Torla y Parque Nacional de Ordesa) de aproximadamente un mes. Mi familia estaba de veraneo en Murcia. Después de dormir en casa más de 12 horas, mi padre que aún estaba en Madrid, me llevó a cenar y al cine a ver esta peli de estreno, en ese cine, y aunque tenía 13 años, aún recuerdo todo aquello. La película ganó el Óscar por mejor canción original Qué será, será cantada por Doris Day. Una canción que luego hemos cantado en muchas ocasiones y que es aquí, parte fundamental del desenlace.

La popularidad de la canción ha llevado a sentir curiosidad por los orígenes de la frase principal y la identidad del idioma. Tanto en su grafía española (usada por los autores) como una versión en italiano ("che sarà sarà") se han hallado documentadas por primera vez en el siglo XVI como lemas heráldicos ingleses.



Los pasajeros de la noche película francesa reciente, de 2022, que no tiene nada que ver con las anteriores y que acabo de ver, con la siempre interesante Charlotte Gainsbourg. Es una peli agradable de ver, modesta y relajada, ambientada en la década de 1980 en París. Cubre una sorprendente cantidad de terreno narrativo y siempre hay algo atractivo y tierno en ello. Aunque toca algunos temas duros, no incide en ellos y hay algo dulce en la actitud positiva de la película hacia la vida. El punto es la curación: las cosas se unen y funcionan y el dolor se suaviza, para acabar desembocando en un abrazo grupal tan cálido y tierno como un clásico de Joe Dassin, que ayuda a aliviar el dolor. A mí me hizo dejar de estar reclinado en el sofá, para sentarme en el borde más cerca de la pantalla.

Galardonada con el premio al mejor guion en la 67ª edición de la Seminci de Valladolid y nominada a los Premios Cesar por su banda sonora con su culmen en la escena del baile-abrazo grupal de la peli acompañados por la canción Et si tu n'existais pas de 1975 por Joe Dassin.

Joe Dassin vivió en numerosos países y hablaba varios idiomas. En el 76 sacó À toi. Las dos canciones las grabó en español, A tí e Y si tu no has de volver con un gran éxito en España y SudAmerica.




Y ya puestos con Joe Dassin, la otra de la que llegué a comprar el LP, cómo casi siempre por una canción, À toi, aunque aquí pongo la versión en español. Me parece que fue alguna discusión o mal momento que había tenido con mi mujer y quería arreglarlo. 



martes, 21 de marzo de 2023

Music To Watch Girls By

 


Durante el mes de marzo de hace 56 años, en 1967, sonó mucho una musiquilla, instrumental principalmente, muy pegadiza (se silbaba y tarareaba con frecuencia) que semejaba bastante a las que hacía Herb Albert y que llegó a estar de las primeras en el ranking de Caravana de Ángel Álvarez, alcanzando el título de Serie Dorada.
Nació como música jingle para una campaña publicitaria de Diet Pepsi de mediados de los 60. Pepsi Cola hizo toda una serie de anuncios de televisión con mirada masculina alrededor de la línea "El tipo de chica que miran las chicas". Por supuesto, se trata de que ella mantenga su figura para que obtenga todas las miradas, incluido un vistazo del presidente.



Bob Crewe, un veterano, mejor conocido por su trabajo de producción y composición con Four Seasons, pensó que la melodía era lo suficientemente pegadiza como para grabarla como un sencillo pop para su lanzamiento general. Rápidamente montó un estudio lleno de músicos de sesión para tocar siete instrumentos de metal, tres saxos, tres guitarras, un piano, batería, timbal y un xilófon, formando así The Bob Crewe Generation.
Music To Watch Girls By, "ejemplificaba el estado groovy de la música instrumental en ese momento" y podía haber sido la banda sonora adecuada para una peli de agentes secretos como Austin Powers.
Por supuesto hoy no habría pasado la censura del Ministerio de Igualdad, sería lo que se dice políticamente incorrecta. Pero ya estamos un poco hartos de lo políticamente correcto.




martes, 14 de marzo de 2023

Júrame amar y vivir


 

Júrame es una canción popular de la compositora mexicana María Grever que ha sido uno de sus éxitos a nivel internacional. Fue a finales de 1957 cuando tengo conciencia de haberla oído por primera vez. Me acuerdo, porque fue cuando volvió mi padre de EE.UU y trajo un puñado de discos y el primer tocadiscos que tuvimos. Estaba en un LP de un tal Tito Guízar, actor y cantante mexicano, protagonista de la película Allá en el Racho Grande en 1936 que se convertiría en la primera en representar a México internacionalmente, además de ser considerada como la cinta que daría inicio a la época de oro del cine mexicano. Además su hermano fue declarado Santo por el Papa Emérito.
El video está hecho con la portada y contraportada de ese LP más algunas fotos.




Al estallar la Revolución Mexicana, María Grever encuentra su escape en Estados Unidos y es en 1926 cuando conoce en Nueva York al tenor José Mojica (cantante, actor y, finalmente, fraile franciscano para el que compuso Agustín Lara su “Solamente una vez” al conocer que se retiraba a franciscano), quien accede a grabar este himno.
Así, la primera versión de Júrame es la de José Mojica y merece la pena oir y comparar.


De María Grever se ha señalado su estilo romántico y elegante. Formó parte, junto a la cubana María Teresa Vera (Veinte años) y a su compatriota Consuelo Velásquez (Bésame mucho, Amar y vivir), de la pléyade de mujeres compositoras que destacaron sobremanera en el mundo del bolero. María Grever compuso unas 800 obras, y entre las más conocidas están: Muñequita lida (Te quiero dijiste), Cuando vuelva a tu lado, Alma mía.

Es curioso como una canción mexicana, en principio un bolero, se ha transformado en una pieza de grandes tenores, desde Caruso, Di Stefano, Domingo, Carreras, Flórez, Villazón y es muy difícil encontrarla como un bolero clásico con el acompañamiento e instrumentos típicos.

En todo caso, entre las versiones líricas, me quedo con la versión de Rolando Villazón, tenor mexicano de los más reconocidos hoy día como se demuestra en obras como La Traviata con Anna Netrebko.




Hablando de Consuelo Velasquez y cómo estoy con boleros, voy a poner algo de Antonio Machín, Amar y vivir, y creo que debe ser el único video en que la interpreta aunque no sea entera.


La Santa Cecilia es un grupo de reciente creación procedente de Los Ángeles (USA) de origen mexicano, como nuestra autora, con un mestizaje acentuado con su alma medio gringa pero capaz de conectar con sus raíces en Amar y vivir en 2017. Hay que reconocer que suena muy bien.




Y una versión más de Amar y vivir, muy distinta, de Bambino rumbeando. Bambino fué el renovador de la denominada canción aflamencada. En torno a 1960 surge el apodo de Bambino cuando presenció una actuación en que se interpretó por rumbas una versión de Chiquillo, un tema melódico grabado por Gloria Lasso, a su vez una versión de la canción napolitana Guaglione de Renato Carosone. Entonces incluyó esa rumba en su repertorio juvenil y sorprendió a sus paisanos con una interpretación en la que mezclaba cante y baile. Los coros de la canción repetían «Bambino, Bambino» y poco a poco, tras cantar y bailar el tema asiduamente, Miguel Vargas Jiménez fue convirtiéndose en Bambino.

Su estilo es personal e inconfundible. Ha sido denominado «cultivador de la rumba dramática»,​ también se ha señalado «su exasperada forma de meter por bulerías la ranchera, el bolero o el cuplé que no ha sido ni será igualada».





sábado, 4 de marzo de 2023

Sing with Swing

 



Sing, Sing, Sing (With a Swing) es una canción de 1936, con música y letra de Louis Prima, grabada por primera vez con su pandilla de Nueva Orleans. La canción está fuertemente identificada con las épocas de big band y swing. En principio iba a ser cantada, como su nombre indica; originalmente fue pensado para la cantante Helen Ward. Sin embargo, los talentosos instrumentistas de la banda siguieron cambiándolo en las actuaciones, agregando nuevos pasajes y citas de otras canciones hasta el punto en que se parecía poco al original.
Una actuación de las primeras grabadas, de Louis Prima y el batería Jimmy Vincent con Sing, sing,sing, quizá con un ritmo extremadamente rápido pero con una demostración de batería.




Y otra mucho más próxima, quizá en Las Vegas en 1964, cantada y con el show de Jimmy Vincent. Su influencia para tocar la batería, especialmente los “shuffles”, está más allá de toda medida. Durante los años de Louis Prima en Las Vegas, los espectáculos de Prima fueron una de las atracciones más populares de la ciudad. Muchos bateristas iban para admirar el estilo de Jimmy y aprender una o dos cosas sobre los “shuffles”.




Varios han interpretado la pieza como instrumental, incluyendo a Fletcher Henderson y, el más famoso, Benny Goodman (y su clarinete) y orquesta en la que la batería de Gene Kupra quedará como motivo reconocible durante todo el tema. La cantante de la orquesta recuerda que una noche Kupra se negó a dejar de tocar la batería cuando llegó al final del tercer coro y Goodman tomó su clarinete y siguieron haciendo solos e improvisaciones. La melodía continuó transformándose de esta manera hasta que alcanzó una duración de ocho minutos y llenó ambos lados de un 78 rpm.

En la mañana del 3 de marzo de 1937 Benny Goodman y su banda llegaron al Teatro Paramount para encontrar multitudes de estudiantes esperando en la fila. Goodman no supuso que esa actuación sería tan importante. Pero cuando la banda apareció en el escenario tocando "Let's Dance", bailaron los 12,000 espectadores, derramándose en los pasillos, en el quiosco de música y en cualquier otro lugar donde pudieran encontrar espacio. Goodman llevó a la audiencia a través de un repertorio típico con todos los éxitos y cuando Goodman terminó con "Sing, Sing, Sing" al final de una actuación de cuarenta y tres minutos, se podía decir con seguridad que la Era del Swing había comenzado.
Esta en una interpretación posterior, de 1954, recordando lo que fue aquella memorable del Paramount y, Gene Kupra a la batería no deja de sonar ni un momento.



Hay una grabación de la actuación en vivo de Goodman en el Carnegie Hall de 1937 (con solos improvisados) que llega a los 12 minutos y medio. Éste video es una parte de esa actuación. No se puede uno dejar de percatar del movimiento de los pies del público.



En julio de 1937, "Sing, Sing, Sing" fue grabada en Hollywood con
Benny Goodman en el clarinete; Gene Kupra en la batería; Harry James a la trompeta.




A diferencia de la mayoría de los arreglos de big band de esa época, limitados en duración a tres minutos para que pudieran grabarse en un lado de un disco estándar de 10 pulgadas y 78 rpm, la versión que la banda de Goodman grabó fue un trabajo extendido. La grabación de 1937 duró 8 minutos y 43 segundos, y ocupó ambos lados de un LP de 78 pulgadas.

En la primavera de 1937, la gente del departamento de marketing de Victor Records tomó nota de las muchas manifestaciones en todo el país de que la música swing se estaba convirtiendo en una tendencia cultural importante, especialmente entre los adultos jóvenes. Los llamados "disturbios de Paramount" que habían acompañado la aparición de Benny Goodman y su banda en el Teatro Paramount en Times Square en Nueva York en marzo de ese año habían creado titulares y reportajes en periódicos y revistas convencionales de costa a costa. El tema era el swing. Los grandes teatros de todo el país estaban pujando por los servicios de las pocas bandas de swing superiores en ese momento en la escena porque las apariciones de esas bandas en los escenarios de los teatros crearon grandes ingresos de taquilla.
Con el fin de capitalizar la fiebre del swing que estaba barriendo la nación, Victor decidió producir un álbum de cuatro discos dedicado al swing, con cuatro de los mejores artistas de swing en la lista de Victor. Esto era inusual. Pero además, se decidió hacer los cuatro discos en bandejas de doce pulgadas del álbum en lugar de los discos de diez pulgadas mucho más comunes. Esto no tenía precedentes. El álbum se tituló “A Symposium of Swing”.

La canción se basa en lo que normalmente no se conoce de ese título – with a swing -. Tocar o cantar con swing es hacerlo con ese estilo de sonido que, además, induce a bailar y, si no, a mover los pies como lo hacen muchos de los espectadores de los videos aquí incluidos.
Cuando yo tocaba algún estandar de jazz, el profe me corregía diciéndome: no haces swing y hasta que no lo conseguía había que repetir. Para que algo suene con swing hay que hacerlo de una manera diferente de interpretar las corcheas. El efecto swing se produce cuando se le da a la primera corchea de cada pulso más duración que a la segunda. Por un lado se enfatiza la primera corchea de cada pulso por el hecho de alargar su duración, pero a la vez gana más importancia la segunda corchea de cada pulso ya que es la nota acentuada.

En realidad muchas personas de la época ni siquiera podían decir qué era el swing, no lo podían definir quizá con palabras, pero sí con sentimientos y formas de bailar. 
Se trata de un movimiento musical que trajo consigo una nueva forma de diversión y de relajación, se convirtió en una especie de droga del momento, todos los jóvenes querían escuchar y bailar swing, aunque a la mayoría de los adultos no les gustaba.
Musicalmente hablando, el swing usa los mismos instrumentos que usa el jazz, pero mezcla el blues y ragtime con la música clásica y da como resultado este electrizante sonido que pone a bailar a cualquiera.
El swing traspasó las fronteras de los instrumentos y se convirtió también en un baile con múltiples variables. Todo comenzó como una evolución del Charleston de los 20, con el Lindy hop, una forma de bailar en pareja más abierta, que se gestó en el barrio de Harlem.
El Lindy hop es el estilo de baile precursor de todas las variaciones de bailar swing que le siguieron en lo que restó de los años 30, 40 y un poco de los 50.

La composición ha aparecido en numerosas películas y programas de televisión. En más de 30 pelis puede escucharse. Aquí, en la peli Swing Kids de 1993 con una versión de Benny Goodman y viendo como se baila el swing con Christian Bale entre otros.



Y cómo ya voy acelerado con el swing, otra escena de la misma película, con la canción   Bei Mir Bist Du Schön (Para mi tu eres preciosa), muy conocida, mayormente por la versión de The Andrews Sisters. Es una canción yiddish de 1932 que tuvo en gran éxito en todo el mundo. En Alemania también hasta que supieron que era judía y quedó prohibida por el regimen nazi. Se entiende por qué en la escena aparece la policía pro-nazi de los Países Bajos. Además del baile "corruptor" de la juventud, la canción era judía. La versión aquí, también es de Benny Goodman. Una canción que no era swing puede hacerse puro swing.